Este día comenzábamos a estudiar el tema de poblaciones para el cual me fue difícil idear una estrategia que fuese amena, divertida y eficaz. Finalmente se me ocurrió cortar aproximadamente 2000 cuadritos en distintos colores de cartulina de construcción, donde cada color representaría a una especie diferente. Esta actividad la iban a realizar en grupos de 3 alumnos.
Tomé la carpeta para formar los grupos de 3 en 3 siguiendo el orden de la lista, inmediatamente comenzaron las quejas y las malas caras de los estudiantes. Los organicé de esta manera porque las veces anteriores que se han reunido a su antojo ha predominado la indisciplina y la flojera de muchos, es decir, siempre trabajando los mismos y el resto paseando o alborotando a los demás.
Les hice caso omiso a las quejas. Les ordené que se organizaran cómo los estaba nombrando. Me parece que estos chicos son o actúan como niños de primaria, están demasiado malcriados y consentidos, lo que quisiera saber es si esta actitud la presentan únicamente conmigo o es con todos los profesores por igual. Sea como sea considero que es necesario ponerle carácter para que se percaten de que a pesar de que existe cierta democracia en el aula, eso no significa que los estudiantes son reyes y que todos debemos hacer exclusivamente lo que a ellos les plazca como si fuésemos sus esclavos.
Después de tanta lucha se organizaron en grupo y comencé la actividad. Me fui al centro del salón y comencé a hacerles preguntas detonadoras de ideas previas. Había bastante ruido y como de costumbre no pedían la palabra sino que hablaban todos a la vez. Luego solté los cuadritos al suelo, y le pedí a un representante de cada grupo que pasara al centro a agarrar los cuadritos de un solo color, pero todo se complicó porque se lanzaron como si fuese una piñata y empezaron a pelearse porque varios de ellos querían un color en especial. Por mi mente pasaba, Dios mío dame paciencia con estos niños…
Luego de que por fin se decidieron por un color, traté de darles las indicaciones de lo que iban a hacer, pero increíblemente no me dejaban, la bulla y la gritería eran tan fuertes que yo ni podía hablar y de paso con el profesor asesor allí presente. La cosa se complicó aún más porque se pusieron fue a hacer siluetas con los cuadritos, lo cual no tenía nada que ver con lo que se iba a hacer. Era desesperante tal situación porque seguían gritando, se paraban, seguían haciendo figuras y prácticamente no me dejaban orientar la actividad.
La cuestión se fue poniendo peor cada vez más, hasta que tuve que decirle al profesor que lo más conveniente era suspender la clase en ese momento y darla como vista porque ya había perdido completamente el dominio de la clase y ésta se me había ido de las manos. Eso se hizo, pero luego el profesor asesor les dio un gran regaño por la actitud que habían asumido, los invitó a reflexionar sobre lo que había pasado, incluso les pidió que me ofrecieran disculpas por la falta de respeto que había tenido todo el grupo para conmigo cuando mi único objetivo había sido prepararles una clase divertida, dinámica pero a la vez productiva e interesante.
Algunos de ellos ofrecieron sus disculpas. Se les llamó el representante porque al parecer otros profesores ya se han quejado de la indisciplina de esa sección.
Realmente quedé muy afectada con esta situación, y hasta llegué a pensar en hacer todo lo posible por cambiarme a otra sección u otro año por el mal rato que me habían hecho pasar de forma tan injusta.
Pero pensándolo bien, creo que esa no es la mejor salida debido a que el año ya va a terminar, queda muy poco tiempo y renunciar sería dejarme derrotar lo cual no es la idea. Trataré en lo posible de terminar usando las estrategias que observé que dieron mayor resultado para mantener en cierto grado la disciplina como es la presentación de vídeos, películas y todo lo que tenga que ver con las TIC’s. Y creo que lo bueno de todo esto fue que todos ese día nos llevamos una lección de vida, lo cual es mucho más importante y útil para la vida que haber comprendido el concepto de poblaciones y las características de éstas.
Tomé la carpeta para formar los grupos de 3 en 3 siguiendo el orden de la lista, inmediatamente comenzaron las quejas y las malas caras de los estudiantes. Los organicé de esta manera porque las veces anteriores que se han reunido a su antojo ha predominado la indisciplina y la flojera de muchos, es decir, siempre trabajando los mismos y el resto paseando o alborotando a los demás.
Les hice caso omiso a las quejas. Les ordené que se organizaran cómo los estaba nombrando. Me parece que estos chicos son o actúan como niños de primaria, están demasiado malcriados y consentidos, lo que quisiera saber es si esta actitud la presentan únicamente conmigo o es con todos los profesores por igual. Sea como sea considero que es necesario ponerle carácter para que se percaten de que a pesar de que existe cierta democracia en el aula, eso no significa que los estudiantes son reyes y que todos debemos hacer exclusivamente lo que a ellos les plazca como si fuésemos sus esclavos.
Después de tanta lucha se organizaron en grupo y comencé la actividad. Me fui al centro del salón y comencé a hacerles preguntas detonadoras de ideas previas. Había bastante ruido y como de costumbre no pedían la palabra sino que hablaban todos a la vez. Luego solté los cuadritos al suelo, y le pedí a un representante de cada grupo que pasara al centro a agarrar los cuadritos de un solo color, pero todo se complicó porque se lanzaron como si fuese una piñata y empezaron a pelearse porque varios de ellos querían un color en especial. Por mi mente pasaba, Dios mío dame paciencia con estos niños…
Luego de que por fin se decidieron por un color, traté de darles las indicaciones de lo que iban a hacer, pero increíblemente no me dejaban, la bulla y la gritería eran tan fuertes que yo ni podía hablar y de paso con el profesor asesor allí presente. La cosa se complicó aún más porque se pusieron fue a hacer siluetas con los cuadritos, lo cual no tenía nada que ver con lo que se iba a hacer. Era desesperante tal situación porque seguían gritando, se paraban, seguían haciendo figuras y prácticamente no me dejaban orientar la actividad.
La cuestión se fue poniendo peor cada vez más, hasta que tuve que decirle al profesor que lo más conveniente era suspender la clase en ese momento y darla como vista porque ya había perdido completamente el dominio de la clase y ésta se me había ido de las manos. Eso se hizo, pero luego el profesor asesor les dio un gran regaño por la actitud que habían asumido, los invitó a reflexionar sobre lo que había pasado, incluso les pidió que me ofrecieran disculpas por la falta de respeto que había tenido todo el grupo para conmigo cuando mi único objetivo había sido prepararles una clase divertida, dinámica pero a la vez productiva e interesante.
Algunos de ellos ofrecieron sus disculpas. Se les llamó el representante porque al parecer otros profesores ya se han quejado de la indisciplina de esa sección.
Realmente quedé muy afectada con esta situación, y hasta llegué a pensar en hacer todo lo posible por cambiarme a otra sección u otro año por el mal rato que me habían hecho pasar de forma tan injusta.
Pero pensándolo bien, creo que esa no es la mejor salida debido a que el año ya va a terminar, queda muy poco tiempo y renunciar sería dejarme derrotar lo cual no es la idea. Trataré en lo posible de terminar usando las estrategias que observé que dieron mayor resultado para mantener en cierto grado la disciplina como es la presentación de vídeos, películas y todo lo que tenga que ver con las TIC’s. Y creo que lo bueno de todo esto fue que todos ese día nos llevamos una lección de vida, lo cual es mucho más importante y útil para la vida que haber comprendido el concepto de poblaciones y las características de éstas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario